“Ayer (miércoles) la ‘denominada coalición internacional’ bombardeó a las 17:30 y 17:50 hora local un objetivo de DAESH en la aldea de Hatla, en el este de Deir al-Zur”, ha informado este jueves el Comando General del Ejército y las Fuerzas Armadas de Siria en un comunicado.
El ataque, explica la fuente militar, primero provocó humo blanco que más tarde se convirtió en amarillo, hecho que demuestra que el bombardeo de la coalición tuvo como fin a un almacén que contiene "una gran cantidad de sustancias tóxicas" de la agrupación terrorista wahabí.
La incursión aérea de la coalición anti-DAESH ha provocado destrucciones y explosiones en la sede terrorista. Además, se informa que "un gran número de civiles murieron como consecuencia de la inhalación de sustancias tóxicas", ha añadido.
Ha subrayado que el incidente confirma que sin duda "los grupos terroristas, en particular DAESH y Frente Al-Nusra (autodenominado Frente Fath Al-Sham), ya poseen armas químicas y tienen la capacidad de transportar, almacenar y usar tales agentes químicos con la ayuda de algunos países regionales".
Asimismo, ha sostenido que el hecho demuestra que las agrupaciones extremistas takfiríes están coordinando con sus patrocinadores para acusar al Ejército sirio de usar armas químicas, tal y como había sucedido en la ciudad de Jan Sheijun, en la provincia noroccidental de Idlib.
Eso ocurre días después de que Washington y sus aliados acusaron al Gobierno sirio de usar armas químicas en Idlib. EE.UU no prestó atención a la petición de Rusia para llevar a cabo una investigación exhaustiva con el fin de probar la culpabilidad de las autoridades sirias y llevó de forma unilateral un ataque contra la base aérea Al-Shairat, en la provincia central de Homs.