odo esto se produce en medio de las discusiones de reconciliación con Fatah.
El miembro del Comité Político de Hamas, Jalil al Hayya, subrayó que la entrega de las armas no será discutida, y recalcó que "la resistencia no puede ser desarmada".
Dijo que el brazo armado de Hamas, las Brigadas Izzeldin al Qassam, son una fuerza para todos los palestinos, al tiempo que señaló que las operaciones se extenderán a la Ribera occidental "hasta el fin de la ocupación" por parte de Israel.
Al Hayya manifestó que la posición de Hamas respecto a la reconciliación sigue siendo positiva, y argumentó que "retirarse no es una opción".
El camino de la reconciliación "fortalece la unidad del pueblo palestino", dijo.
También defendió los pasos dados hasta la fecha por Hamas y Fatah para buscar la unidad administrativa y territorial. Asimismo, pidió apoyo regional y destacó el papel que juega Egipto como mediador.
El dirigente palestino criticó las propuestas surgidas desde sectores de Fatah para aplazar la nueva ronda de discusiones, siendo precisamente la entrega de las armas de Hamas uno de los escollos más importantes en el proceso.