TEHERÁN. (ABNA) – El Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán ensalza la unidad de las Fuerzas Armadas de Irán frente a la ofensiva de Estados Unidos contra el Cuerpo de Guardianes iraníes.
Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) – En un encuentro con altos mandos del Ejército y efectivos de la Fuerza Terrestre del Ejército en Teherán, capital iraní, el Imam Jamenei ha manifestado hoy miércoles su desprecio por la decisión de Washington de declarar “terrorista” al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI).
El Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán ha considerado “necesaria” la unidad cada vez mayor entre el Ejército y el CGRI, y se ha mostrado contento por que ello haya enojado al enemigo.
En el acto, celebrado con motivo del Día Nacional del Ejército, el 18 de abril, el Imam Jamenei ha dicho que las Fuerzas Armadas son “una muestra y un elemento constitutivo del poder nacional” que garantizan la seguridad de la nación.
“Sin embargo, en muchos países, incluso aquellos que se dicen defensores de la libertad y los derechos humanos, las Fuerzas Armadas son un elemento de poder para proteger a dictaduras y reprimir a la nación”, ha dicho el Líder Supremo, tomando como ejemplo la violencia ejercida por la Policía francesa contra el movimiento de los chalecos amarillos.
A juicio del Imam Jamenei, el Ejército de Irán es ahora “más devoto y más eficiente” que nunca. El Líder Supremo ha ensalzado además el papel clave de las Fuerzas Armadas iraníes en la lucha contra el terrorismo y en la derrota del grupo terrorista takfirí del Daesh, en Iraq y Siria.
“Si el Ejército y el Cuerpo de Guardianes no hubieran luchado en su día contra el Daesh, ¿en qué situación estrían los países vecinos y de la región (del oeste de Asia)? ¿Quiénes estarían gobernándolos?”, ha preguntado, antes de valorar el papel en la lucha antiterrorista de los Ejércitos de los países más azotados por el terrorismo.
El comandante de la Fuerza Terrestre del Ejército iraní, el general de brigada Kiumars Heidari, ha aprovechado el acto a su vez para condenar la ofensiva de Washington contra el CGRI y reafirmar el compromiso del Ejército con la defensa, junto al Cuerpo de Guardianes, del sistema de la República Islámica.