La televisión siria anunció que integrantes del grupo terrorista wahabí Frente Fatah al-Sham (antiguo Frente Al-Nusra) fueron los autores de la quema del transporte, pues esa agrupación extremista rechazó desde el inicio permitir su entrada a la ciudad.
Estaba previsto que en total unas 4 mil personas fueran evacuadas de ambas poblaciones chiitas asediadas por el grupo Frente Al-Nusra, y situadas en el noreste de la provincia de Idleb.
La evacuación de los civiles y los grupos terroristas del este de Alepo fue condicionada al traslado de los enfermos, heridos y otros civiles de esos dos pueblos, según un acuerdo alcanzado por Turquía, Rusia e Irán.
El traslado de los grupos armados y civiles se realiza bajo supervisión de la Media Luna Roja siria y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Por su parte, Cheikh Moaz al-Khatib, ex presidente de la coalición de la oposición siria publicó en su cuenta en la red social Facebook, su desprecio a los grupos armados que quemaron los autobuses consagrados a la evacuación de civiles de las ciudades de Kefraya y Al Fauaa en la provincia de Idleb.
Moaz al-Khatib dijo: "Quiero sacar el agua que tengo en la boca y hablar, esos que quemaron los autobuses que eran para reducir la muerte de personas no son idiotas sino verdaderos criminales".
Agregó que esas agrupaciones armadas no se formaron del vacío, son herramientas utilizadas por algunos estados regionales para llevar a cabo todo lo que se ha hecho durante los últimos tres años y medio.
Señaló que lo peor que han hecho fue demonizar el Islam, y sabotear Siria en todas las esferas, especialmente empujando a los jóvenes a esa guerra hacia la muerte inútil.
Sheikh Moaz al-Khatib hizo hincapié en que los extranjeros que son parte de esos grupos y organizaciones han contribuido a la venta de ilusiones.
