Por Sayed Muhammad Rizvi
Muchos estudiantes de historia Islámica inician sus estudios con la jactancia de que si un suceso o una narración no ha sido informada en las primeras fuentes de la historia o en los hadices como as-Sirah an-Nabawiyya de Ibn Hisham o Sahíh de Bukhari, debe ser una invención posterior y por lo tanto no tiene credibilidad.
Tienden a ignorar los prejuicios y limitaciones que son impuestas al escritor por parte de los poderes gobernantes así como también por las inclinaciones propias. No solamente son importantes los prejuicios en las invenciones de personajes míticos, los sucesos y las frases pronunciadas, todos son igualmente relevantes al ignorar y desviar silenciosamente ciertas figuras y narraciones históricas.
Este artículo trata de examinar la forma en que los historiadores musulmanes han analizado el primer llamado en público o convocatoria al Islam que hizo el Profeta Muhammad, conocido como Dawat zul-´Ashira.
El Islam comenzó cuando el Profeta Muhammad (La paz sea con él y con su progenie) tenía cuarenta años de edad. Inicialmente la misión era mantenida en secreto. Luego tres años después de la llegada del Islam, el Profeta recibió la orden de iniciar una declaración abierta de su mensaje. Fue en esta ocasión cuando Al-lah Todo poderoso, reveló el versículo وَأَنذِرْ عَشِيرَتَكَ الاَقْرَبِينَ “Y amonesta a tus parientes cercanos.” (26:214)
Cuando fue revelado este versículo, el Profeta organizó un banquete que es conocido en la historia como “La invitación familiar –Dawat zul-´Ashira–”. El Profeta invitó aproximadamente a cuarenta hombres de los Bani Hashim (su clan y familia), y le pidió a ´Ali ibn Abi Talib que hiciera los preparativos para la cena. Después de haber atendido a sus invitados con alimentos y bebidas, cuando el Profeta quiso hablarles acerca del Islam, Abu Lahab le impidió hacerlo y dijo, “Vuestro anfitrión hace mucho que os ha embrujado”. Todos los invitados se dispersaron antes de que el Profeta pudiera presentarles el mensaje.
Luego el Profeta los invitó al día siguiente. Después del banquete, les habló diciéndoles:
¡Oh Hijos de Abdul Muttalib! Por Dios que no conozco a una persona entre los árabes que haya llegado a su pueblo con algo mejor que lo que yo he traído para ustedes. Les he traído el bien de este mundo y el próximo, y el Señor me ha Ordenado invitarlos a Su camino. Por lo tanto, ¿Cuál de ustedes me apoyará en este asunto convirtiéndose así en mi hermano (ají), mi sucesor (wasiyí) y mi califa (jalifatí)?
Esta fue la primera vez que el Profeta abierta y públicamente invitó a sus familiares a aceptarlo como el Mensajero y Profeta de Dios; también utilizó las palabras “ají wa wasiyyí wa jalifatí –mi hermano, mi sucesor, mi califa” refiriéndose a la persona que lo ayudaría en esa misión. Nadie respondió; todos se abstuvieron excepto el más joven de todos ellos– ´Ali ibn Abi Talib. ´Ali se puso de pie y dijo, “Yo seré tu ayudante, O Profeta de Dios.”
El Profeta colocó su mano sobre el cuello de Alí y dijo:
“Inna hadha akhí wa wasiyí wa khalifatí fikum, fasmaú lahu wa atí´u –Ciertamente este es mi hermano, mi sucesor, y mi califa entre ustedes, por lo tanto, escúchenle y obdezcanle–.”15
Este fue un pronunciamiento muy explicito porque los allí presente entendieron la designación de ´Ali muy claramente. Algunos de ellos, incluyendo a Abu Lahab, se burlaron de Abu Talib, diciéndole, ¡tu sobrino Muhammad, te ha ordenado que escuches y obedezcas a tu hijo! Al menos esto demuestra que la designación de ´Ali ibn Abi Talib fue clara y explplícita, no solo implícita.
Una de las preguntas que surgen con relación a este tema es ¿Por qué Abdul Malik ibn Hisham (fallecido en el 213 después de la Hégira) no menciona este suceso en su as-Sirah an-Nabawiyya –La Biografía del Profeta–?
Después de todo, él es el mas antiguo de todos los biógrafos del Profeta.
Lo que se conoce de la Sirah de Ibn Hisham es realmente el resumen del libro de Muhammad ibn Ishâq (nacido en el año 85 de la Hégira en Medina y que murió en el 151 de la Hégira en Bagdad). La versión completa ya no existe. Entonces la pregunta debe ser reformulada: “¿Acaso Ibn Ishâq mencionó el suceso de la Invitación Familiar”?
Las consideraciones políticas que influyeron en Ibn Hisham para borrar ciertos eventos y preservar otros son claras a partir de su propia declaración.
En cuanto enumera los puntos que ha omitido, Ibn Hisham escribió: “...Cosas que son desagradables discutir; temas que molestarían a ciertas personas…todas estas cosas las he omitido.”16 Los editores de la edición Egipcia de 1955 de la Sirah escribieron que Ibn Ishaq había citado sucesos que no le agradaban a los Abbasidas, como lo es la participación de Abbas junto a los infieles en la batalla de Badr y su captura por los musulmanes –la narración que posteriormente Ibn Hisham omitió por temor a los Abbasidas–.”17
Las alabanzas a Imam ´Ali bin Abi Talib, especialmente la tradición de Dar, está entre los puntos que Ibn Hisham omitió en su resumen de la Sirah de Ibn Ishaq. La Tradición de Dar trata sobre la Invitación hecha a la Familia mencionada anteriormente.
El hecho de que ibn Ishaq haya mencionado la Invitación de la Familia puede ser vista a través de aquellos que han narrado los sucesos de Ibn Ishaq por fuentes diferentes a las de Ibn Hisham. Por ejemplo, at-Tabari (falleció en el 310 de la Hégira) narra el mismo evento a través de ibn Ishaq. Sahykh Abu Yafar at-Tusi (fallecido en el 460 de la Hégira) también narra el mismo suceso a través de dos cadenas de narradores diferentes: uno de esos dos es bajo la autoridad de Ibn Ishaq a través de at-Tabari.18...
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15 La mayoría de los historiadores y comentaristas musulmanes del Corán han citado este suceso. Ver las siguientes fuentes sunnitas; at-Tabari, at-Tarikh, Vol. 1 (Leiden, 1980)p. 171-173, Ibn al-Azir, al-Kamil, Vol. 5 (Beirut, 1965) p. 62-63; Abul Fida´al-Mukhtasar fi Taríkh al Bashar, vol. I ( Beirut, n.d) p. 116-117; al Khazan, at-Tafsir, vol. 4 (Cairo, 1955) p. 127; al Baghawi, at-Tafsír (Ma´alimu ´t-TAnzil), Vol. 6 (Riyad: Dar Tayyiba, 1993) p. 131; al-Bayhaqui, Dalaa´ilu´n-Nubuwwa, vol 1 (Cairo, 1969) p. 428-430; as-Suyuti, ad-Durru´l-Manzur, vol. 5 ( Beirut, n.d) p. 97; y Muttaqui al-Hindi, Kanzul Ummal, vol. 15 (Heyderabad, 1968) pp. 100, 113, 115. Para más referencias, ver Ábdul Huseyb al-Amini al-Gadir, Vol. 2 (Beirut, 1967) pp. 278-289.
En idioma Inglés ver, Rizvi, S. Saeed Akhtar, Imamate: the Vicegerency of the Prophet (Tehrán: WOFIS, 1985) pp. 57-60. Para una discusión sobre el isnaad y el significado de los hadices del Profeta en este suceso, también sobre las variaciones en las primeras fuentes Sunnitas y Shi’as ver Dr. Sayyid Talib Huseyn ar-Rifaí, Yaumud Dar (Beirut: Dar ai-Azwa, 1986).
16 Ibn Hisham, as-Sirah an-Nabawiya, vol. 1 (Cairo: Mustafa al Halabi e hijos, 1955) p. 11-12: también ver su traducción al Inglés hecha por A. Guillaume, The Life of Muhammad (Lahore: Oxford University Press, 1955) p. 691. También ver la introducción por Dr. Asgari Mahdawi a la traducción Persa del siglo sexto por Rafiud-Din Hamadani de la Sirah, titulada como Sirat-e Rasulul-lah (Teherán, Bunyad-e-Farhang-e-Irán, 1360(solar) A:H)
17 Ibn Hisham, as-Sirah, vol. 1, p. 10
18 Abu Yapar at-Tusi, Kitabul Amaali, vol. 2 (Nayaf: Maktabatul Haydari, 1964) p. 194-196.