De acuerdo con el informe publicado por el organismo internacional, en los próximos años el mundo tendrá que abordar el acuciante problema de la poca eficiencia en el uso del petróleo por parte de las compañías de transporte. A menos que no se resuelva este desafío, la demanda de crudo seguirá aumentando de forma drástica.
Según los cálculos de la Agencia Internacional de la Energía, para 2040 el elevado tráfico de mercancías por carretera hará que el consumo de petróleo mundial aumente en 5 millones de barriles diarios.
Desde el año 2000, por ejemplo, el transporte por carretera ha estado consumiendo al menos 17 millones de barriles al día.
Pudiera parecer que esta es una buena noticia para la industria petrolera de cualquier país rico en esta materia prima, sin embargo, el vertiginoso crecimiento de la demanda de crudo tendrá consecuencias negativas para sus Gobiernos en la lucha contra el cambio climático y la reducción de la producción petrolera.